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Artículo La Dieta Magnética – Por Paramahansa Yogananda

Dieta Magnética

Lo que el agua destilada es para una batería eléctrica, es el alimento para la batería del cuerpo. La energía vital en la batería del cuerpo se deriva de la Energía Cósmica a través de la médula oblonga y del alimento. La energía vital en el cuerpo separa los constituyentes de los alimentos y los transforma en energía. La compleja tarea de la fuerza vital, consiste en destilar más fuerza vital de los nutrientes ingeridos por el cuerpo. Por consiguiente, la dieta debería limitarse a alimentos que se transformen fácilmente en energía o que produzcan energía fresca. El oxígeno y la luz del sol deberían tener un lugar muy importante en nuestra vida, debido a su cualidad de producir energía directa. Cuanto más dependas de la voluntad y la Energía Cósmica para sostenerte, necesitarás menos alimento; cuanto más dependas de la comida, más débil será tu voluntad y menores tus recursos de Energía Cósmica.

La dieta magnética consiste en aquellos sustitutos de los alimentos, como los rayos del sol y el oxígeno, que pueden ser asimilados fácilmente y convertidos en energía por las fuerzas vitales latentes en el cuerpo. Los alimentos magnéticos proporcionan energía más rápidamente que los sólidos y líquidos, que se convierten menos fácilmente en fuerza vital. Cuando estés cansado o hambriento, toma un baño de sol (ten cuidado si tienes la piel delicada) y te sentirás recargado y reavivado con los rayos ultravioleta; o inhala y exhala varias veces al aire libre o cerca de una ventana abierta y tu fatiga se irá. Una persona que ayuna, si inhala y exhala doce veces profundamente, tres veces al día, recarga su cuerpo con electrones y energía libre del aire y el éter. La fuerza vital asimila oxígeno más rápidamente que los sólidos o líquidos. El contacto de los alimentos y el oxígeno con el sistema corporal interno, es necesario para que la fuerza vital los convierta en energía.

Practica el siguiente ejercicio tres veces al día: Exhala despacio, contando de 1 a 6. Cuando los pulmones estén vacíos, cuenta mentalmente de 1 a 6. Inhala despacio, contando de 1 a 6. Entonces sostén la respiración, contando de 1 a 6. Repítelo once veces. No sostengas nunca la respiración más de lo que tardes en contar despacio de 1 a 6 o, a lo sumo, de 1 a 12.

Así como la electricidad pasa a través de una varilla conductora y la electriza, así la batería del cuerpo se recarga totalmente con la fuerza vital derivada del oxígeno. Las personas que realizan ejercicios respiratorios, tienen siempre los ojos brillantes, magnéticos. Los baños de sol de una hora son también parte de la dieta magnética. Los rayos ultravioleta que se absorben en un día de playa, ejercen un beneficioso efecto vitalizante en el cuerpo, el cual dura aproximadamente tres meses. Cura las llagas y heridas exponiéndolas al sol media hora diaria. Los tratamientos con rayos ultravioleta e infrarrojos producidos artificialmente, también suministran nutrición magnética. Tomados bajo la guía de un especialista, pueden resultar muy beneficiosos. Los cristales de ventana ordinarios, impiden a los rayos ultravioleta del sol penetrar en una habitación. Vivir en una habitación soleada cerrada con cristales de cuarzo amarillo, a través de los cuales penetran los rayos ultravioleta, proporcionaría al cuerpo humano nutrición magnética espiritual, haciéndolo espiritualmente magnético. Un hombre que viviera en una habitación cerrada con cristales de cuarzo rojo, vería desarrollarse en él la fuerza bruta. Cada una de los muchos billones de células del cuerpo humano es una diminuta boca nutriéndose. La fuerza vital, identificada con el cuerpo, crea en nosotros un deseo de obtener energía de la circulación y de los alimentos contenidos en el estómago. La fuerza vital debe entrenarse para extraer la energía de fuentes más sutiles. Las necesidades de energía del cuerpo pueden obtenerse en parte del sol y el oxígeno absorbidos por los poros. Por esta razón, la superficie de la piel debe mantenerse escrupulosamente limpia en todo momento. El ejercicio realizado con voluntad y concentración, produce resultados excelentes, porque crea energía desarrollada directamente por la voluntad. Los músculos, sangre, huesos y nervios, absorben esta energía rápidamente para la regeneración celular. Por consiguiente, el nivel más alto de energía acompañado por la menor destrucción de tejido, se consigue con los Ejercicios de Energetización. (Las instrucciones están disponibles en el Curso de Autorrealización de Ananda). Cargar el cuerpo de vez en cuando con electricidad, sujetando dos electrodos de una batería, es un buen método para abastecer el cuerpo con energía libre. (La corriente eléctrica debe ser muy débil). Bañarse en agua calentada por el sol, saturada con rayos ultravioleta, es muy beneficioso. Frotar el cuerpo desnudo vigorosa y rápidamente con las palmas antes de tomar un baño, genera fuerza vital y es también muy beneficioso. Si un hombre débil lucha o vive en la misma habitación que un individuo fuerte, vital, absorbe algo del magnetismo vital y mental de este último. Por esta razón las personas jóvenes y viejas deberían mezclarse e intercambiar así magnetismo. Distintas personas tienen diferentes tipos de vitalidad. Intenta descubrir siempre métodos nuevos para recibir las cualidades energéticas directamente de diferentes personas.

Como norma, la palabra “alimento” sólo se usa en relación con la nutrición material, pero hay otros tipos de alimento: la energía mental o concentración y la Sabiduría Divina. El primero (el alimento material) recarga la batería del cuerpo, el segundo (la concentración) la batería de la mente, el tercero (la Sabiduría Divina) la batería del alma. Los alimentos materiales adecuados, tomados en las combinaciones correctas, no sólo son necesarios para el sustento del cuerpo, también ejercen una influencia decisiva en el cerebro. El cerebro espiritual, el cerebro activo y el cerebro material, son afectados por el alimento. Pueden formarse las siguientes combinaciones: (1) cerebro espiritualmente activo, (2) cerebro intelectualmente activo y (3) cerebro materialmente activo. Todo alimento produce una sensación en el paladar, así como ciertos efectos químicos en el cuerpo y el cerebro. Las sensaciones de los alimentos determinan una mentalidad específica. Alimentos como la carne seca, producen reacciones materiales groseras, las cuales desarrollan un cerebro material y una mente animal. Comer alimentos activos, vitales, como cebollas, ajo, carne fresca (no seca) etc. produce un cerebro activo. Comer frutas y verduras crudas, produce cualidades espirituales en el consumidor y desarrolla una mente y un cerebro espirituales. La cualidad de sabor y color del alimento, es transmitida al cerebro a través de los nervios del gusto y de la vista y se experimenta como una sensación agradable o desagradable específica. Estas sensaciones se elaboran como percepciones y concepciones. Las concepciones repetidas sobre los alimentos, forman hábitos mentales definidos y se manifiestan como cualidades materiales, activas o espirituales.

Dieta Magnética mental

Ya sabemos que los alimentos materiales proporcionan al cuerpo energía, también debemos recordar que los buenos pensamientos son alimentos nutritivos para la mente y que los pensamientos de cualquier otra naturaleza son venenosos para la salud del cuerpo y la mente. ¿Has analizado alguna vez tu dieta magnética mental?. Normalmente consiste en pensamientos propios y pensamientos que recibes del contacto con los pensamientos íntimos de tus amigos. Los pensamientos pacíficos y los amigos pacíficos producen siempre mentes saludables, magnéticas. Es fácil ver si una persona se alimenta de un ambiente pendenciero o pacífico. El descontento y las preocupaciones debidas a unos amigos equivocados o a la no valoración por parte de los parientes cercanos, producen una mente insana y pesimista. Librar a la Mente de los Venenos de la Preocupación Si padeces una enfermedad mental, cúrate, ponte a régimen. Un saludable ayuno mental aclarará tu mente y la librará de los venenos mentales, acumulados como resultado de una dieta mental descuidada y defectuosa.

En primer lugar, aprende a eliminar las causas de tus preocupaciones sin permitirles inquietarte. No alimentes tu mente con los venenos mentales creados cada día por nuevas preocupaciones. Las preocupaciones son a menudo el resultado de intentar hacer demasiadas cosas apresuradamente. No “engullas” tus deberes mentales, mastícalos a fondo, uno a uno, con los dientes de la atención y empápalos con la saliva del buen juicio. Así evitarás la indigestión de la inquietud.

Ayuno de preocupaciones

A continuación debes seguir el ayuno de preocupación. Tres veces al día, quítate de encima todas las preocupaciones.

A las siete de la mañana dite a ti mismo, “Me deshago de todas mis preocupaciones de la noche y de 7 a 8 me niego a preocuparme, no importa cuán problemáticos sean los deberes que me esperan. Estoy siguiendo un ayuno de preocupación”. De 12 a 1, di, “Estoy alegre, no me preocuparé”. Por la tarde, entre las seis y las nueve, mientras estés en compañía de tu marido o esposa o de parientes o amigos, “difíciles de soportar” toma mentalmente una fuerte resolución y di, “Durante estas tres horas no me preocuparé, me niego a sentirme molesto, aun cuando me acosen. No importa cuán tentador sea permitirme un festín de preocupaciones, resistiré la tentación. He estado muy enfermo de preocupaciones, mi corazón de paz ha estado enfermo. He tenido varios “ataques al corazón” de inquietud. No debo paralizar y matar mi corazón de paz por los impactos de las preocupaciones. Estoy en ayuno de preocupaciones. No puedo permitirme estar preocupado”. Cuando hayas conseguido llevar a cabo ayunos de preocupación durante ciertas horas al día, trata de hacerlos durante una o dos semanas seguidas y después intenta evitar la acumulación de los venenos de la preocupación en tu organismo, completamente. Cada vez que te permitas un festín de preocupación, sigue el ayuno de preocupación parcial o total durante un día o una semana. Cada vez que tomes la determinación de no preocuparte, es decir, de seguir un ayuno de preocupación, mantén tu resolución. Puedes dejar de preocuparte completamente. Puedes resolver serenamente tus problemas más difíciles, empeñándote con el mayor esfuerzo y al mismo tiempo negándote absolutamente a preocuparte. Di a tu mente, “sólo puedo hacer las cosas lo mejor posible, nada más. Estoy satisfecho y feliz porque estoy haciendo todo lo posible por resolver mi problema; no hay absolutamente ninguna razón por la que deba preocuparme hasta la muerte”. Cuando estés haciendo el ayuno de preocupación, es necesario que no te encuentres en un estado mental negativo. Bebe copiosamente las aguas frescas de paz que fluyen de la primavera de cada circunstancia, vitalizadas por tu determinación de estar alegre. Si has tomado la decisión de estar alegre, nada puede hacerte infeliz. Si no eliges destruir tu propia paz mental aceptando la sugerencia de circunstancias infelices, nadie puede desalentarte. Tú sólo te ocupas de la realización incansable de acciones correctas y no de sus resultados. Deja esto último a Dios, diciendo, “He hecho cuanto he podido en estas circunstancias. Por consiguiente, soy feliz”.

La alegría como Cura de la Preocupación

El método negativo de superar el envenenamiento de preocupación, es el ayuno de preocupación. Hay también métodos positivos. Quien esté infectado con los gérmenes de la preocupación, debe seguir un estricto régimen mental. Debe darse festines, con frugalidad, pero regularmente, en la sociedad de las mentes gozosas… Todos los días debe asociarse –aunque sea sólo un momento– con “las mentes infectadas de gozo”. Hay personas cuya canción de risa nada puede acallar. Búscalas y date con ellas el banquete de la más vivificante comida de alegría. Continúa la dieta de la risa durante un mes o dos. Date banquetes de risa en compañía de personas verdaderamente alegres. Digiérelo completamente, masticando a fondo la risa con los dientes de tu atención. Continúa la dieta de la risa con firmeza una vez empezada y al finalizar un mes o dos verás el cambio, tu mente estará llena de luz solar. Recuerda, los hábitos específicos sólo pueden ser cultivados con acciones creadoras de hábitos específicos.

Dieta de valor

Habiéndote beneficiado del ayuno de preocupación, prueba a continuación el ayuno del miedo; sigue un régimen de valor durante algunas horas, días o semanas. Debes actuar espiritualmente para ser espiritual.

Dieta de la Sabiduría

Para destruir la ignorancia, sigue un régimen de sabiduría. Bebe el tónico de la sabiduría de los labios de la intuición. Puedes aprender de la intuición cuando estés en la cámara de la meditación profunda. Lee buenos libros de naturaleza devocional y espiritual, tomando de ellos lo que necesites. Consulta a un especialista espiritual. Si tu enfermedad de ignorancia es crónica, guíate completamente por él. Un paciente así no puede curarse dependiendo sólo de su propio juicio, ya que éste puede estar afectado por su estado de mala salud mental. Sigue los ayunos de eliminación de la ignorancia. Niégate a ser esclavizado por hábitos ignorantes y acciones irreflexivas. Comienza un estudio espiritual intensivo y una dieta espiritual intensiva y niégate a padecer por más tiempo la infección de la ignorancia.

Superación del Estancamiento Mental

El estancamiento mental es “Tuberculosis mental”. Sal de tu cámara cerrada de estrechez. Bebe el aire fresco de los pensamientos y opiniones vitales de otros. Bebe vitalidad; recibe nutrición mental de las mentes material y espiritualmente progresivas. Festeja con prodigalidad el pensamiento creativo, tuyo y de los demás. Da largos paseos mentales por los caminos de la confianza en ti mismo. Ejercítate con los instrumentos de juicio, introspección e iniciativa. Exhala los pensamientos perniciosos de desaliento, descontento, desesperación, etc. Inhala el oxígeno fresco del éxito y sé consciente de que estás progresando con la ayuda de Dios. Esto recargará la batería de tu alma. Experimentando conscientemente la Beatitud de Dios a través de la meditación, puedes destruir conscientemente el estancamiento mental y adquirir salud espiritual y sabiduría progresivas.

Adquirir perfección Física, Mental y Espiritual

Así, día a día, tomando alimentos productores de magnetismo espiritual y absorbiendo la luz solar productora de vitalidad, reflejarás físicamente la juventud eterna de Dios. Eliminando todos los venenos mentales y compartiendo la nutrición divina de la determinación, valor, esfuerzo mental continuo e infatigable y concentración, aprenderás a superar los problemas más difíciles con facilidad.

Eliminando la ignorancia por la meditación constante en Dios y siguiendo los preceptos de Yogoda y de tu maestro espiritual, conseguirás una salud espiritual perfecta. Una vez que adquieras esta salud espiritual, entregarás tu vida a los demás, para mostrarles el camino hacia la suprema, embriagadora salud espiritual. Cuando hayas aprendido a comer alimentos adecuados, elaborar pensamientos correctos, a estar lleno de sabiduría y gozo, tu cuerpo, mente y alma se espiritualizarán y las sentirás como dinamos de energía magnética. Tu cuerpo y mente purificados por esta energía, asumirán la belleza del Espíritu. Cuando te comprendas a ti mismo como un alma, sabrás que perteneces al Espíritu, que reposa en todas partes con la misma alegría, en todo el espacio, en todas las cosas, siendo uno con todas las cosas. El imán del cuerpo, mente y alma, recargado con buenos alimentos, rayos solares, poder, sabiduría y Beatitud, atrae hacia sí todas las almas materiales y espirituales de similar profundidad de magnetismo espiritual. Un imán espiritual está cargado con la vida de Dios y a quienquiera que toque hace de él Dios.

Resumen

Quienes piensan que la vida depende sólo del desayuno, la comida y la cena –de sólidos y líquidos– tienen una mentalidad grosera. Podemos obtener energía tanto de alimentos materiales como de Origen Cósmico. El hombre del futuro extraerá nutrientes del éter y del océano de Energía Cósmica invisible en que se mueve y tiene su ser. El objetivo de esta lección es dirigir la atención del estudiante a la conveniencia de extraer sus necesidades de energía, tanto como sea posible, del aire y de la luz del sol. La nutrición obtenida de estas dos fuentes puede convertirse más fácilmente en energía dentro del cuerpo. Esta lección también muestra al estudiante la necesidad de elegir sólo los alimentos materiales que emiten y depositan vibraciones espirituales en la mente y cerebro humanos. Los alimentos materiales imprimen en la mente ciertas cualidades buenas o malas y los pensamientos, las acciones y la salud de las personas, generalmente vienen determinados por los alimentos que consumen.

 

Edición: Romina Medina – Profesora de Hatha Yoga Dinámico

Fuente: Del libro «Las Técnicas de curación con la Voluntad Divina» de Paramhansa Yogananda. Por Mary Kretzmann, el Director de Ananda Oración Ministerio.

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