
extracto: «En el país de los cuentos había una vez un pequeño duende. Un duende muy travieso que siempre andaba riendo y saltando de un lado para otro… Vivía en una casita toda rodeada de montañas. A [seguir leyendo]
extracto: «En el país de los cuentos había una vez un pequeño duende. Un duende muy travieso que siempre andaba riendo y saltando de un lado para otro… Vivía en una casita toda rodeada de montañas. A [seguir leyendo]
extracto: Cuentan que en un monasterio situado en un valle de alguna región de China había un monje en extremo dedicado. Trabajaba duramente día a día para incorporar los preceptos de la vida Zen y las enseñanzas [seguir leyendo]
extracto: Quiero que me oigas, sin juzgarme. Quiero que opines, sin aconsejarme. Quiero que confíes en mí, sin exigirme. Quiero que me ayudes, sin intentar decidir por mí. Quiero que me cuides, sin anularme. [seguir leyendo]
extracto: La idea de este cuento llegó a mí escuchando un relato de Enrique Mariscal. Me permití, partir de allí, prolongar el cuento, transformarlo en otra historia con otro mensaje y otro sentido. Así como [seguir leyendo]
extracto: «… Caminaba distraídamente por la calle cuando la vio. Era una enorme y hermosa montaña de oro. El sol le daba de lleno y al rozar su superficie reflejaba tornasoles multicolores, que la hacían [seguir leyendo]
extracto: No había en el pueblo un oficio peor conceptuado y peor pago que el de portero del prostíbulo. Pero ¿qué otra cosa podría hacer aquel hombre? De hecho, nunca había aprendido a leer ni a escribir, [seguir leyendo]
extracto: En un oasis escondido entre los más lejanos paisajes del desierto, se encontraba el viejo ELIAHU de rodillas, a un costado de algunas palmeras datileras. Su vecino HAKIM, el acaudalado mercader, se detuvo [seguir leyendo]
extracto: Cavando, para montar un cerco que separara mi terreno del de mi vecino, me encontré enterrado en mi jardín, un viejo cofre lleno de monedas de oro. A mi no me interesó por la riqueza, me interesó por [seguir leyendo]
extracto: Un señor muy creyente sentía que estaba cerca de recibir una luz que le iluminara el camino que debía seguir. Todas las noches, al acostarse, le pedía a Dios que le enviara una señal sobre cómo tenía [seguir leyendo]
extracto: Esta ciudad no estaba habitada por personas, como todas las demás ciudades del planeta. Esta ciudad estaba habitada por pozos. Pozos vivientes… pero pozos al fin. Los pozos se diferenciaban entre [seguir leyendo]