Después de 5 meses retrógrado, Plutón se estacionó hace una semana y se puso directo a 20º de Capricornio. Cuando un planeta está a punto de ponerse retrógrado o directo crea un poderoso portal que potencia su influencia en tu vida. En el caso de Plutón podría manifestarse como:
Profundas inmersiones para llegar a la verdad.
Ver tu sombra más claramente o tener que confrontarla a través de otras personas.
El colapso de lo que no funciona.
Transformación.
Muerte: puede tratarse de la muerte de alguien o del final de una relación, de un rol, una identidad, un trabajo, un hábito, una perspectiva, un patrón o una línea de tiempo que marca el comienzo de un importante punto de inflexión en nuestras vidas.
Cuestiones relacionadas con el poder.
Recuerda cómo han sido los últimos 7 días.
¿Qué tema principal destaca?
¿Hubo alguna interacción, alguna comprensión o evento significativo?
¿Has trazado una línea en la arena porque sabes que no puedes tolerar / aceptar / seguir haciendo algo?
¿Tienes o no conciencia de que el cambio está llamando a tu puerta?
¿Tu propio poder te está llamando?
Plutón representa el Fénix que se alza sobre sus cenizas. Aunque sintamos que no sobreviviremos al intenso proceso necesario para experimentar un cambio profundo y duradero, el renacimiento llegará tarde o temprano. Primero tendremos que rendirnos a la voluntad del Alma, permitir que lo que debemos soltar se desprenda y que lo que debe nacer, nazca.
Este Plutón directo es particularmente potente porque Saturno le pisa los talones y se prepara para su importante reunión el 12 de Enero de 2020 (a 22º de Capricornio). Este es un asunto serio en el severo signo de Capricornio… 2020 no es un juego. Todo lo que nos está llegando nos está preparando para el clímax de Enero. Y, para asegurarnos de que estamos listos para la conjunción de Saturno/Plutón, y para el año 2020 de «No estoy para jueguecitos», habrá un Eclipse Lunar a 20º de Cáncer en oposición a Saturno/Plutón dos días antes, el 10 de enero de 2020.
Plutón representa las transformaciones necesarias que suelen exigirnos un proceso de muerte y renacimiento. También representa el poder: en qué áreas lo poseemos o no, dónde lo usamos bien o abusamos de él en detrimento de otras personas. Plutón nos muestra nuestra sombra, esa parte de nosotros que proyectamos en los demás porque reconocerla o sentirla nos resulta demasiado incómodo. Es el punto ciego personal sobre el cual Plutón llama nuestra atención cuando estamos listos.
Saturno nos habla de sentar bases sólidas, de asumir nuestra responsabilidad y crecer. También representa la autoridad, los sistemas y estructuras. Es el Padre… al que tenemos que bajar del pedestal donde le colocamos para reclamar nuestro propio Padre/autoridad interna. El padre en este caso podría corresponderse con nuestro padre real, pero también representa a cualquier persona que haya ejercido autoridad sobre nosotros a nivel personal o colectivo: jefes de trabajo, jefes de empresa, instituciones religiosas, gobiernos.
Los eclipses lunares nos ayudan a soltar y a ver lo que no podíamos ver antes. Pueden representar el final de un capítulo, un cierre, una comprensión que necesitamos.
Si todo esto sucede simultáneamente en el signo de Capricornio (el domicilio de Saturno), podemos asegurar que 2020 está dejando claras sus intenciones de antemano.
Habrá MUCHA actividad en la escena global y política en 2020. Muchos tenemos un papel muy específico que desempeñar, ya sea «mantener la luz», a falta de un término mejor, compartir las verdades más oscuras o apoyar el proceso de despertar de mil maneras diferentes. Es de vital importancia que nos relacionemos bien con nuestras energías de Plutón y Saturno, que hayamos trabajado internamente con ellas de manera adecuada y que sigamos haciéndolo, considerándolas nuestras aliadas durante los próximos 3 meses y los 12 meses de 2020. ¿Por qué? En pocas palabras, porque así es como conseguiremos la máxima potencia y la mínima resistencia (nuestra o de los demás) a la hora de hacer las cosas.
Estos dos planetas son extremos, por decirlo con suavidad. Si los evitamos o los ignoramos, puede darnos la sensación de que todo se pone en nuestra contra. En cambio, si abrimos los ojos y preguntamos: «¿Qué quieres que sepa /que haga / que recuerde?», podremos vivir el proceso de transformación de Plutón con más facilidad. Después empezamos a hacer las listas de Saturno, pisamos el suelo con las botas y hacemos metódicamente lo que hay que hacer.
Trabajando con Plutón:
1) ¿Hay alguna parte de mí, de mi identidad o de mi vida que se está resistiendo al cambio?
2) ¿Qué pienso sobre el poder? ¿Cómo estoy usando mi poder? ¿Cómo quiero usarlo?
3) ¿Qué parte de mí está lista para manifestarse a mayor escala?
4) ¿Con qué tipo de personas me encuentro continuamente, y qué están tratando de enseñarme?
Trabajando con Saturno:
1) ¿Todavía tengo problemas con el «padre»?
2) ¿Todavía tengo problemas con la «autoridad»? ¿Cómo es mi relación con mi autoridad interna? ¿Me siento conectado con mi soberanía interior?
3) ¿En qué debo asumir mayor responsabilidad por mi vida?
4) ¿Cómo se manifiesta la energía del «control» en mi vida?
5) ¿Qué es lo que realmente quiero? ¿Qué planes / estrategias de ir paso a paso / listas de tareas / acciones diarias debo poner en práctica?
6) ¿Qué me viene a la mente cuando pienso en “estabilidad y seguridad”? ¿Cómo puedo crear una base interna sólida con la que siempre pueda contar, pase lo que pase? ¿Cómo puedo crear una firme base externa que me apoye y me sostenga?
Si quieres anotar las respuestas en tu diario, ¡tienes distracción para rato!
© Dana Mrkich 2019 Se permite compartir este artículo gratuitamente siempre que se acredite la autora y se incluya la URL www.danamrkich.com
11 de Octubre 2019
Traducción: Rosa García
Fuente: El Manantial del Caduceo
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