Una lucha por la vida y una historia de amor
Saturno cuadra a Urano tres veces este año (febrero, junio y diciembre). Esta plaza es, por tanto, un factor definitorio en los acontecimientos de 2021, especialmente a nivel colectivo y social. Saturno es el planeta de la disciplina, el tiempo del calendario, el karma y la responsabilidad. Urano es el planeta de la liberación, la individualidad, la libertad y la innovación. Lejos de ser compañeros de cama naturales, estos dos pesos pesados cósmicos ahora se embarcan en una danza que verá mucha interrupción y giros y vueltas impredecibles. Si cree que sabe lo que sucede después, piénselo de nuevo. Si está seguro de su visión del mundo, deje que los bordes comiencen a difuminarse porque no es lo que parece. Cuando Saturno cuadra a Urano, todos tenemos la tarea de construir un futuro a partir de la sabiduría de la experiencia, potenciada por la apertura a nuevas posibilidades.
¡Fuera de la valla!
Con la cuadratura ocurriendo en los signos fijos de Acuario y Tauro, las consecuencias de este tiempo serán duraderas e irrevocables. Un cuadrado fijo no deja ninguna duda de que se deben tomar medidas y se requiere un resultado tangible. ¡No nos saldremos impunes este año! Todos necesitamos profundizar y mantenernos firmes cuando se trata de las decisiones que tomamos y las acciones que tomamos. Urano en Tauro altera el status quo, cambiando incluso las condiciones más intransigentes y circunstancias profundamente arraigadas. Saturno en Acuario nos obliga a todos a rendir cuentas y recalca la responsabilidad que compartimos de dirigir a la familia humana en una dirección que afirma la vida. El lado oscuro de esta danza cósmica cuadrada ve esfuerzos para constreñir el espíritu creativo; controlar una narrativa y sus resultados;
Esta cuadratura entre Saturno y Urano insiste en que confrontemos lo que está sucediendo en nuestro mundo, contemplemos los hechos, asimilemos la verdad y decidamos dónde estamos. No podemos dejar esto en manos de otros ni permitir que ‘expertos’ autoproclamados nos digan qué creer. Si bien las libertades en todo el mundo están cada vez más limitadas, conservamos para siempre la libertad de llegar a nuestras propias conclusiones y actuar en consecuencia. Cuando sacrificamos eso por la «conveniencia» de que nos digan qué pensar, se pierde toda esperanza.
Saturno: nuestro amigo sabio y fiel
Saturno quiere que seamos resistentes, sabios y fuertes, capaces de resistir los desafíos de la vida, aprovechar sus oportunidades y asumir nuestra parte de responsabilidad. No es nada si no es pragmático. Si hay un problema, ¡resuélvalo! Si ha cometido un error, ¡aséelo! Saturno nos somete a un campo de entrenamiento y pone a prueba nuestro temple en todo momento. Puede sentirse como un castigo, pero cuando voluntariamente tomamos nuestra parte, algo comienza a cambiar. Enfrentar el miedo se vuelve un poco más fácil; la paciencia necesaria para alcanzar nuestro objetivo está de alguna manera más disponible; nuestra capacidad de resistir cuando pensamos que estábamos rotos aumenta paso a paso. Saturno nos quiere completos, no fragmentados por el miedo y la negación. Hará lo que sea necesario para llevarnos de esa manera, pero nos da la bienvenida como aliados en el proceso.
Saturno nos madura, poniendo fuerza en nuestro corazón, sabiduría en nuestra mente y hierro en nuestra alma. Saturno está en él a largo plazo y también nos quiere allí. Ve nuestro potencial, los desafíos que tenemos por delante, lo que debemos soportar y las bendiciones de hacerlo. Nos recompensa con paciencia, sabiduría y previsión, seguridad interior y una paz profunda, profunda que nace de conocernos tan bien que nada puede sacudirnos o desviarnos por mucho tiempo.
Sin embargo, si nos hacemos la víctima, lamentando un destino injusto, Saturno no tolerará la autocompasión y es posible que sintamos un fuerte golpe en los nudillos. No importa cuánto podamos justificar el sentir lástima por nosotros mismos, Saturno insiste en que nos elevemos para encontrarnos con la vida, no permitir que nos golpee. Ve la autocompasión como una abdicación intolerable de la responsabilidad y el poder, y simplemente no podemos permitirnos tal abandono del deber sagrado en este momento.
Urano: nuestro libertador
Mientras Saturno pone nuestros pies en el fuego, Urano nos invita a reinventarnos. Nos recuerda que nada está escrito en piedra siempre que estemos preparados para liberar todo lo que nos ata en el mismo momento en que lo haga. No una semana, un mes o años después, sino inmediatamente, liberando el dolor familiar, las viejas creencias y hábitos, los comportamientos que nos sabotean y las condiciones que nos mantienen estancados. No permita que nada se pegue en su campo de energía. Visualícelo como agua corriente, viento impetuoso. Vea su movimiento constante. Al identificarnos con las pruebas de la vida, comprando su drama en lugar de reclamar nuestra libertad, creamos sustancia donde debería estar el movimiento, calcificando pensamientos y sentimientos innecesariamente. Reconocer y revertir este proceso es clave para un cambio profundo y duradero este año.
La luna lo hace personal
La Luna está en conjunción con Urano en el momento de esta primera cuadratura, lo que hace que la energía uraniana de emancipación, pensamiento innovador y liberación de restricciones pasadas sea el más fuerte de los dos impulsos en este punto. En Tauro, la Luna es sensual, física, leal, inflexible y predecible. Cuando está en conjunción con Urano, ella revela otra cara de Tauro: el potencial de un cambio profundo y profundamente arraigado que nace de un largo proceso de paciente ajuste interno. Si has estado trabajando en algún proyecto en tu vida, ya sea interno o externo, este cuadrado Saturno / Urano es una garantía de que tu arduo trabajo no se desperdiciará. Si el año pasado se sintió como nadar contra corriente o escalar una montaña con los pies ensangrentados, este año ofrece recompensas a aquellos que tengan el coraje de mantenerse firmes y seguir adelante sin importar las luchas que se avecinan.
Reconstruyendo de abajo hacia arriba
Pero este es un juego largo, no un resultado rápido. El trabajo interno y externo requerido es como ningún otro que hayamos encontrado. Tanto para las personas como para las instituciones, se requiere una reestructuración de abajo hacia arriba de todo lo que está dentro y fuera. Es aterrador, abrumador, intimidante y agotador. Pero también es estimulante, inspirador y rejuvenecedor. No podemos atravesar el estado actual del mundo si permanecemos igual. Debemos cambiar. Debemos permitirnos renacer de nuevo, realinearnos, reducirnos a las necesidades absolutas de la vida para poder enfocarnos y actuar con gran sabiduría y mucho coraje.
Esta plaza debe ser honrada con toda nuestra atención, el más profundo respeto y el firme compromiso de explotar plenamente sus dones y gracias. Pondrá en marcha cambios que de otro modo estarían rezagados, mejorará las certezas y catalizará cuestiones y temas que darán forma a los próximos años. La acción de esta plaza a lo largo de 2021, revelará las verdades más profundas de nuestras vidas. Muchos de nosotros podemos quedarnos conmocionados por lo que vemos, pero de ahí la libertad no puede evitar surgir.
La danza cósmica cuadrada de la revolución responsable
Con esta danza entre el pasado (Saturno) y el futuro (Urano), entre la revolución (Urano) y la responsabilidad (Saturno), incluso las cosas con las que pensamos que nos habíamos ocupado podrían resurgir por un tiempo. Las relaciones pueden reproducir viejas dinámicas. Las situaciones estables pueden tornarse en forma de pera. Nuestra propia calma interior puede vacilar y el progreso pagado con sangre, sudor y lágrimas puede comenzar a flaquear. Que esto no sea ninguna sorpresa. Estos son tiempos increíbles de inmenso desafío. Está bien vacilar, sentir el miedo, incluso perder la esperanza. Pero nunca dejes que ninguno de estos estados sea la última palabra, porque estamos en movimiento, en un viaje. Y el sol sale fresco todos los días.
En esta cuadratura, Saturno y Urano enseñan que la mente puede ser nuestro liberador y nuestro carcelero. Si permitimos que nos oprima con una negativa a pensar fuera de la caja, cuestionar lo que escuchamos y aplicar nuestro propio conocimiento interior a las verdades recibidas, nos encerraremos en una prisión interior desprovista de nuestro poder único para discernir nuestra propia soberanía. Pero si podemos expandir nuestra mente para abrazar posibilidades previamente descartadas, para ver la vida desde una perspectiva nueva y vernos a nosotros mismos de nuevo, nos espera una liberación ilimitada. Los velos entre la mente egoica y la superior son delgados como un papel ahora y podemos romperlos fácilmente, con el más mínimo esfuerzo si así lo deseamos. Este año hay nuevas perspectivas esperando ser vistas, algo que simplemente no hemos percibido sobre nuestra situación puede revolucionar el camino por delante en el momento de su revelación.
Fácil está sobrevalorado
¡De ninguna manera este cuadrado es un aspecto ‘fácil’! ¡Pero lo fácil está sobrevalorado cuando hay una revisión total de la humanidad en la mezcla! A medida que el mundo se bloquea y las grandes farmacéuticas son cada vez más promocionadas como el mesías, cada uno de nosotros tiene la tarea de hacer nuestra parte para dar a luz el futuro que queremos que sea nuestra realidad. Si no lo hacemos, ¡tenga la seguridad de que alguien más lo hará por nosotros! Somos nuestros propios salvadores, soberanos hasta el final. Nunca ha sido más importante que ahora, saber esto en nuestros huesos.
Sin embargo, si permitimos que el lado oscuro de Saturno en Acuario informe nuestras elecciones, corremos el riesgo de ceder al miedo a lo desconocido, permitiendo que cualquiera que ofrezca certeza, sin importar sus motivos, se convierta en nuestro maestro. Saturno en Acuario puede ser muy reacio a ponerse de pie y ser contado o hacer lo contrario de lo que otros esperan. Busca seguridad al ser parte de la multitud, sin importar el sacrificio de soberanía que la multitud pueda exigir a cambio. Pero en la medida en que cedamos nuestro derecho inalienable a pensar por nosotros mismos, la tensión aumentará a medida que avance este año. Estamos siendo despertados para finalmente vivir la vida a propósito. Audaz y descarada en nuestra afirmación de que todos tenemos derecho a ser libres.
Un grito de batalla poético
Este año es tanto una lucha por la vida como una historia de amor, un grito de batalla y la época de los sueños del alma. Estamos decidiendo el futuro de la humanidad con cada uno de nuestros pensamientos, palabras y acciones. Requiere un compromiso audaz y el coraje de buscar soluciones innovadoras a viejos problemas. Soluciones que se atreven a desafiar a todas las llamadas ‘normales’ hasta ahora. La elección es saltar ahora o ser empujado más tarde. ¡Pero de cualquier manera debemos cambiar en algún momento! Esta cuadratura entre Saturno y Urano dice que es mejor seguir adelante hoy, porque quedarse quieto ya no es una opción. El futuro, nuestro futuro, aguarda.
Sarah Varcas
13/02/2021
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